martes, 28 de diciembre de 2010

El tren que pedimos

Desde hace años los placentinos soñamos con la llegada de la gran infraestructura del desarrollo que llamamos AVE.


Cuando hemos tenido la oportunidad de ver y analizar el progreso regalado por la Alta Velocidad a ciudades por las que transcurre hace años, como Ciudad Real, Guadalajara, Valladolid o Málaga, así como las de más reciente incorporación a la red ferroviaria más moderna, como Cuenca o Valencia, es fácil reconocer las bonanzas de este veloz medio de comunicación.

De la mano de alcaldes como el de Cuenca, ciudad hermanada con Plasencia, el de Guadalajara o la alcaldesa de Ciudad Real, hemos podido comprobar como los vagones del AVE van llenos, a su paso y parada por estas ciudades, de nuevas industrias y nuevas empresas, van cargados de trabajo, de oportunidades para todos, de turistas ávidos de conocer cada rincón de estas poblaciones y de dejar riquezas en el ámbito de los servicios, que crecen con intensidad ante la necesidad de atender a los visitantes... en fin, una larga lista de sueños hechos realidad que nosotros tardaremos en tener debido, sobre todo, a la mala gestión y a la escasa preocupación de quienes nos gobiernan.

Al tiempo que tardemos en ver ese prometido y fechado en tantas ocasiones, AVE del futuro, hay que añadir que nuestra ciudad nunca poseerá esta infraestructura soñada para su desarrollo, pues, entre otras cosas, la estación del AVE placentino no existe al ubicarse lejos de nuestro término municipal.

Será en Malpartida de Plasencia donde se construya la estación, quizá porque su alcalde fue más astuto que la alcaldesa de Plasencia a la hora de reivindicar una tan necesaria acción para la capital de la alta Extremadura.

Qué respuesta dará ahora el edil de Desarrollo Económico del actual Equipo de Gobierno, cuando tantas veces reivindicó a los gobiernos del PP que la nueva estación para el AVE se ubicará en los aledaños del enclave denominado Fuentidueñas, situado al sur de nuestro término municipal, allí donde se unen las autovías A-66 y EX-1, en aquel llamado por él mismo: "nudo de comunicaciones de Plasencia". Qué respuesta nos dará en estos momentos a los placentinos la alcaldesa y su equipo de gobierno cuando ni el AVE llega, ni pasará jamás por la ciudad del Jerte.

Es una triste herencia que nos dejan ocho años de infructuoso gobierno local socialista, treinta años de pésimos gobiernos regionales socialistas, algo más de seis años de triste gobierno del socialista Zapatero en Madrid.

El olvido a Plasencia y al norte de Extremadura se hace de nuevo patente en este relato de acontecimientos que tienen que ver con un tren que perdemos y que nos traía parte del progreso y del desarrollo económico que tanto necesita una ciudad y una región con un delgado y frágil tejido industrial y empresarial que nos hace estar en los primeros puestos autonómicos y locales en las listas del desempleo.

No quiero terminar sin trasladar la esperanza de la ilusión, estoy convencido que otras maneras de gobernar basadas en el amor profundo al suelo que pisamos harán posible el cambio para conseguir una Plasencia mejor, más justa, una Plasencia de la justicia, de la libertad y de las oportunidades para todos.

Ayúdame a hacer de este sueño una realidad.

Un fuerte abrazo para todos.


1 comentario:

  1. Que Plasencia no tenga la estación y si Malpartida (la alcaldesa es socialista,no?) es una aberración. ¿Algún día el PSOE tendrá en cuenta a Plasencia como núcelo urbano central de las comarcas con más potencial de Extremadura? SE cargaron la Ruta de la Plata, nos pusieron autovía tarde y mal... Como salmantino que ha estudiado, vivido y trabajado en Plasencia tienes todo mi apoyo para tu candidatura (el apoyo de un compañero popular más, de muchos)

    ResponderEliminar